La inglesa Tracy Kiss tiene 34 años, dos niños y es preparadora física. Además, es una influencer sexual que tiene una muy potente cuenta en Instagram con 1.200.000 seguidores donde da consejos sobre alimentación, deporte y lo que ella considera vida sana.
En los inicios de la pandemia fue noticia en todo el mundo cuando recomendó una ingesta de licuado de semen, pepino y frutas, algo que, para Tracy, aumentaría las defensa del organismo para combatir el Covid-19.
Y con el correr de los meses la británica fue por más: se hizo un nuevo tatuaje en su escultural cuerpo, ni más ni menos que una regla para medir el tamaño del pene de los hombres con los que mantiene relaciones sexuales.
La mujer dijo que está buscando un novio bien dotado y que su nuevo arte corporal es «un diseño práctico y una herramienta para mejorar mi vida». El tatuaje no incluye ningún número, sino que presenta «puntos» que equivales a uno y dos centímetros.
“Como no tiene números, en realidad es bastante discreto y me permite estirar la mano inocentemente para acariciar el estómago de un hombre mientras miro mi brazo junto a él para contar los centímetros”, exclamó la creativa rubia.
“Es algo en lo que la gente puede no pensar cuando me da la mano y no parecerá fuera de lugar en un asilo de ancianos cuando tenga 90 años, pero siempre pondrá una sonrisa en mi rostro y un brillo en mis ojos”, añadió entusiasmada sobre su nuevo tatuaje.
Kiss, quien dijo que tiene una libido alta y una vez tuvo relaciones sexuales 11 veces en un día, dijo que conocer el tamaño de su pareja es importante para ella. “Soy una mujer que disfruta del placer, la confianza corporal y la intimidad y siento que las mujeres tienen tanto derecho como los hombres a hablar honestamente sobre los encuentros sexuales”, declaró.
La hija adolescente de Kiss inicialmente creyó que el tatuaje estaba diseñado para medir plátanos y pepinos, pero finalmente Kiss le explicó para que era. “Mi hija está ahora en una edad en la que se da cuenta de mi descarado sentido del humor y se da cuenta de los chistes de adultos que antes no comprendía”, dijo Kiss.
“Estoy bastante tentada de agregar algunos puntos desde mi pulgar hasta mi dedo índice para medir la circunferencia de los penes al mismo tiempo, pero no estoy segura de si sería demasiado obvio lo que estoy haciendo”, afirmó.