El priapismo es una erección prolongada y normalmente dolorosa que persiste durante horas después de la estimulación sexual, o que aparece incluso sin estimulación sexual alguna.
No es ninguna broma, de hecho quienes la sufren deben buscar ayuda médica de emergencia.
El nombre de la condición deriva del Dios de la fertilidad en la mitología griega, Priapus, al que siempre se representaba en pinturas y esculturas con un gran falo en erección.
El priapismo afecta con mayor frecuencia a los hombres en la treintena, según información de la Clínica Mayo de Estados Unidos.
Aunque en términos generales es una condición poco común, es habitual en ciertos grupos de pacientes con otras enfermedades de fondo, y también puede aparecer como un efecto secundario de ciertas medicaciones y del abuso de drogas, como el alcohol, la marihuana, la cocaína y otras sustancias ilícitas.
El priapismo no está causado por la estimulación sexual, sino por un problema de circulación de la sangre, que se queda bloqueada en el pene.
Normalmente la erección se produce cuando aumenta el flujo sanguíneo hacia los tejidos esponjosos del pene ante una estimulación física o psicológica. Terminada la estimulación, la sangre fluye hacia afuera y el pene retorna a su estado no rígido (flácido).
Pero en el caso del priapismo ese flujo sanguíneo normal está alterado, y por eso la erección persiste. Y si no se trata, puede ser peligroso.
Si no circula la sangre se pueden formar coágulos y el tejido eréctil puede quedar dañado o morir por falta de oxígeno en las células, lo cual potencialmente podría resultar en un caso permanente de disfunción eréctil.
Información: ecuavisa.com