Los Angeles Lakers afrontaban un partido clave para sus aspiraciones de Playoffs frente a Oklahoma City Thunder, sin LeBron James, Anthony Davis (preservado en la segunda noche de un back-to-back) ni D’Angelo Russell. El escenario era sumamente complicado para los de Darvin Ham, pero con una gran actuación de sus nombres complementarios, terminaron festejando una necesaria victoria por 123-117.
Ante las bajas, Dennis Schröder, Troy Brown y Austin Reaves cargaron con la ofensiva de los Lakers, tomando 43 lanzamientos entre los tres. El alemán terminó con 26 puntos, Brown aportó 19 y Reaves otros 19, con un perfecto 5-5 de campo.
De todas maneras, la diferencia del partido pasó por el trabajo defensivo de la visita, ayudada por la baja de Shai Gilgeous-Alexander en el Thunder. Josh Giddey (22 puntos, 11 asistencias, 9 rebotes) y Jalen Williams (24 puntos y 7 asistencias) hicieron lo que pudieron para disimular su ausencia, pero sabemos que cuando falta SGA, Oklahoma City normalmente se desmorona. Lo de este miércoles fue un ejemplo más de ello y ahora acumulan cinco caídas al hilo (cuatro de ellos sin el canadiense). Un competidor menos en la batalla por el Top 10 de la Conferencia.
Para los Lakers resultaba fundamental salir ilesos de esta mini gira de tres partidos como visitantes ante rivales del Oeste. Y así lo hicieron, con dos victorias (Mavericks y Thunder) y solo una derrota (Grizzlies). Ahora, afrontan una seguidilla de cinco encuentros consecutivos en casa, donde buscarán seguir recortando la brecha para meterse en zona de Play-In.
Probablemente con los regresos de Davis y Russell, jugarán este viernes ante Minnesota, para después recibir a Golden State, Memphis, Toronto y New York. Momento bisagra para la 2022-2023 de los californianos.
