Los efectos del Brexit comienzan a dejarse notar ya en el equilibrio de fuerzas económicas de la Eurozona. La economía francesa creció un 0,5% en el tercer trimestre, según anunció hoy el Instituto Nacional de Estadística (INSEE), lo que le ha supuesto adelantar al Reino Unido y consolidarse como la segunda economía de la Unión Europea y la quinta a nivel mundial.
El instituto francés, además, revisó al alza en una décima sus propios cálculos sobre el trimestre precedente, hasta el 0,6%, lo que significa que, aún si en los tres últimos meses del año la economía se estancara, el PIB francés aumentaría un 1,7% en el conjunto de 2017, señaló el INSEE en un comunicado.
Del otro lado, la semana pasada se conoció que la economía británica creció un 0,4% en el tercer trimestre de 2017, más de lo esperado por el mercado, que preveía un avance de solo el 0,3% por el impacto de la negociación del Brexit con la Unión Europea (UE), según los datos difundidos por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONS).
No obstante, pese a que la expansión del PIB británico fue mayor de lo esperado, arroja un crecimiento interanual del 1,5%, por debajo del 2% estimado por el Gobierno. De hecho, el PIB británico presenta una tendencia a la baja en 2017, tras haberse expandido un 0,7% en el último trimestre del año pasado.
Estas cifras chocan con las de Francia, que registra un alza interanual del PIB a finales de septiembre del 2,2%, un ritmo que no se había registrado desde 2011. El avance de la actividad en el tercer trimestre tuvo que ver, esencialmente, con la aceleración del consumo (aumentó un 0,5%, tras haberlo hecho un 0,3% en el segundo) y con el mantenimiento de la cadencia de ascenso de la inversión a un ritmo elevado (un 0,8%, después del 1%).
Información: ABC
