Las frases de nostalgia y las lágrimas fueron las acompañantes de un sepelio poco común en estos tiempos. Aunque para la Asociación Salvadoreña de Trabajadores Municipales (ASTRAM), esto no es nada nuevo. Durante el conflicto armado, la junta directiva, fue perseguida por las fuertes denuncias a los atropellos laborales. La mayor parte de sus miembros murieron.

El viernes 7 de agosto parecía que el sindicato volvía a esa época. Su lucha  contra las persecuciones políticas a causa de las denuncias por los derechos laborales se mantienen, hoy más fuertes que nunca. Weder Meléndez, era uno de los máximos denunciantes de los atropellos que el alcalde, Ernesto Muyshondt ha tenido desde que asumió la gestión de la comuna capitalina. La apropiación de las cuotas laborales se sumó a una serie de demandas que se ha hecho a la alcaldía. Además de esto había hecho público que el jefe edilicio habría querido despedirlo por las mismas causas.

Los sindicalistas usaron sus uniformes de trabajo, otros camisas emblemáticas de los movimientos sindicales a los que representan para darle el último adiós a Weder.

Alfredo Cartagena, secretario de ASTRAM en San Salvador, señaló que el homicidio del líder sindicalista es una represalia, un acto de “cobardía por estar demandando las injusticias en la alcaldía de San Salvador. El compañero Weder era una  de los pioneros en demandar la corrupción en la alcaldía capitalina. Yo creo que es mala la decisión que han tomado y el vil asesinato que han cometido contra el compañero”, destacó Cartagena.

Con una voz entrecortada, Cartagena, señaló que el homicidio de Meléndez no quedará impune, pero también señaló que no se detendrán en su lucha contra las injusticias, pues dentro de los empleados hay familias muy perjudicadas y por ellos la lucha continuará.

“Por eso como asociación vamos a continuar al pie del cañón demandando las injusticias, muchos empleados han caído en mora con las instituciones. Nosotros no nos vamos a dejar intimidar”, puntualizó.

Amigos y compañeros de trabajo, colegas de otros sindicatos acompañaron el féretro desde la sede de ASTRAM y pasaron frente a la alcaldía capitalina como un acto de protesta por el acto de homicidio que se le atribuye al alcalde, Ernesto Muyshondt.

Para este lunes arrecia la lucha sindical y esta vez la protesta se traslada a los tribunales de San Salvador donde se llevaría el proceso del alcalde capitalino por investigaciones de agrupaciones con pandillas y hasta por la entrega de dinero a cambio de votos para ganar sus elecciones y las del diputado y en ese momento candidato presidencial Norman Quijano.