“Las personas más pobres son las que salen afectadas siempre”, son las palabras de una mujer residente de la zona de Santa Tecla, al ver a los despedidos de la comuna de dicho municipio que actualmente acampan a las afueras del Palacio Municipal, sobre la zona turística Paseo El Carmen.
Para los que circulan por esa vía, es fácil solidarizarse con los ex trabajares, ya que se les puede ver en sus rostros el cansancio y la preocupación que llevan a cuestas desde el 1 de agosto, día que no olvidarán, ya que sin justificación fueron notificados de sus despidos y cruelmente engañados por la administración de la comuna tecleña.
Actualmente ya llevan 9 días esperando una explicación por parte del alcalde de Santa Tecla, Roberto d’Aubuisson, pero ni en medios de comunicación ha querido dar su postura referente a este tema, mucho menos entablar una mesa de diálogo que les lleve una esperanza a estas personas.
Es triste ver de primera mano la situación de estas personas que son cabeza de hogar, madres solteras, hombres de avanzada edad y algunos con problemas de salud; varios de los despedidos que se encuentran en la protesta ya comienzan a tener complicaciones de salud, otros se quebrantan por la incertidumbre de no saber cuál será su futuro, ya que el alcalde no ha querido tener una mesa de diálogo.
“La preocupación más grande que tenemos es ¿Cómo llevarles la comidita a nuestros hijos? Aún que uno no coma eso no importa, aquí con los compañeros aún que sea tortilla con queso hemos podido comer, pero es duro dejar a la familia en casa y sin comida, uno siente que se va a morir de la preocupación”, dijo una madre soltera que es uno de los tantos casos que hay entre los despedidos.
Estas personas están esperando una mano amiga, por lo que hacen el llamado para que les puedan donar víveres, agua o colaboración para poder sobre llevar un poco la crisis que están pasando.