Ya se sabía que hay especies animales que tienen fluorescencia natural. Quizás el caso más conocido es el de la Proteína Fluorescente Verde (Green Fluorescente Protein, GFP), purificada a partir de una medusa y que se usa en laboratorios de todo el mundo como marcador molecular.
En una investigación publicada en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS), un grupo interdisciplinario de investigadores de la Argentina y Brasil presentaron el primer caso de fluorescencia natural en anfibios, en una especie de rana arborícola que tiene una muy amplia distribución en Sudamérica (Hypsiboas punctatus).
Durante la investigación se vio que los ejemplares juveniles y adultos de Hypsiboas punctatus producían una intensa fluorescencia verde azulada en su superficie cuando se los iluminaba con luz UV-A/azul.
Se sabe, además, que los ojos de las ranas tienen su máxima sensibilidad en la zona del espectro de la luz donde ocurre la fluorescencia y pueden reconocer esta fluorescencia entre ellas.
Información: Clarín